El front desk muy desorganizado, se ve desordenado, el personal es amable, pero en general están colapsados.
El desayuno es pobre, no se condice con la categoría de hotel.
El restaurant malo, hay peleas internas entre el personal, se olvidan las comandas, se equivocan al cobrar.
La carta del room service no tiene opciones saludables. La comida es cara para la calidad que ofrece.
No hay opción de recargar agua en ningun lado, algo que muchos hoteles de esa categoría, al menos 1 agua de cortesía brindan.
La habitación muy bien, muy cómoda y bien aseada.